Arriba del todo mi firma a la izquierda y a continuación a su derecha el título Diario de un Nac Mac Feegle. Justo debajo pone blog personal. Todo ello en letras negras. Debajo de todo eso mi cabecera, alargada y estrecha, ocupa todo el ancho de la página: DIARIO DE UN NAC MAC FEEGLE escrito con la curva adecuada para que formen el símbólo del infinito. A su derecha una media luna que lo bordea. Colores verde, naranja y marrón claro. A la izquierda del todo y abajo una foto de mi cara dentro de un circulo en plan avatar, todo ello sobre fondo negro. Debajo de esta cabecera ya viene el texto en letras negras sobre fondo blanco. Abajo del texto en mayúsculas pone LEER COMPLETO EN y una mano que señala en la última fila de abajo soyaspieyque.com que está escrito con los colores de la cabecera y a su derecha el mismo infinito también de la cabecera. El texto central de la imagen dice: "Bonus track" (sí amigos, aún hay más). "Entrenen, compitan y cállense la boca" Sergio Egea, entrenador de fútbol. Venga un hilo final de verdad con cosas que se quedaron en el tintero y nos pueden resultar muy útiles.

Star Wars: la rigidez mental VI

Toda esta saga de Star Wars viene a colación de una petición que me hicisteis para hablar de la rigidez mental. No se me ocurrió mejor manera de hacerlo que enfocarlo partiendo de «los enfados». Me parecía una de las causas que más nos dificultan nuestra vida diaria, una auténtica central nuclear generadora de ansiedad. Para ello, era imprescindible hablar de las distorsiones cognitivas, de la ansiedad, comprender como funciona para poder tomar medidas después, etc. pero ya metidos en materia, es importante que sepáis que existen muchas más distorsiones cognitivas que la rigidez propia del enfado. Lo bueno es que se gestionan exactamente igual (eso que ya tenemos ganado).

Voy a comentaros algunas de ellas que fijo que reconoceréis:

Hay un tipo muy habitual que son las de futuro. En internet podréis encontrar que las llaman de mil maneras distintas. Lo importante no es el nombre, es saber lo que son:
Le mandas un whatsapp a alguien y no te contesta. Empiezas con el “rucu rucu”: pasa de mí, se habrá enfadado, a saber que le habré hecho, seguro que ya metí la pata y por eso no me contesta, ya no me quiere, estará con otra y por eso no me responde…

Eso es una distorsión clara, ¿por qué?, pues porque igual simplemente es que está durmiendo y ya está. Nos estamos haciendo sangre para nada.

¿Cómo se gestiona?

Pues igual que los enfados. Detecto que estoy teniendo una distorsión, dejo de pelearme con mis pensamientos y sigo con lo mío. O lo que es lo mismo: «entrenen, compitan y cállense la boca».

¿A qué viene esta frase?:

  • Entrenen: ya hemos hablado de cómo hacerlo. Cuanto más entrenemos más fácil vamos a detectar las distorsiones, dejaremos de darle de comer a nuestra ansiedad, adelgazará y seremos capaces mucho más a menudo de continuar con nuestras vidas.
  • Compitan: sigue haciendo lo que estabas haciendo o busca la solución para lo que sea que tengas que solucionar. ¡Si tienes miedo, hazlo con miedo!, ¡pero hazlo! Sigue con lo tuyo, no dejes de hacer cosas.

  • Cállense la boca: deja de quejarte que no vale para nada. Deja el “rucu rucu” en paz, no le hagas caso y sigue con lo que estabas haciendo.

Otra muy común es la de jugar a ser Rappel. No somos adivinos: Seguro que no me eligen en ese trabajo porque no estuve bien en la entrevista. Tenía que haber dicho esto y esto otro y no lo dije. Buf, ya verás… seguro que no me llaman porque yo nunca tengo suerte, porque nunca me quieren.

STOP. Entrenen, compitan y CÁLLENSE LA BOCA.

Otra habitual es la de que voy a suspender porque no me sé bien esta parte. ¡Pero si te sabes perfectamente el otro 90%! o si tu maestro te dice nueve cosas bien sobre tu trabajo y una a mejorar y te pasas el día entero centrándote sólo en la negativa obviando todas las positivas, culpándote por haber hecho una mal en vez de felicitarte por haber hecho las otras nueve bien. Si esta semana he hecho deporte dos veces y cinco no, me felicito por esas dos veces. Recordad que los pensamientos que entrenemos serán los que engorden.

¡Felicitaros por lo que hacéis coño!, ¡que es muy sano!

Dejad de culparos por TODO que eso también es una distorsión, ver sólo lo negativo de vosotros mismos es una distorsión y de las más dañinas.

STOP. Entrenen, compitan y CÁLLENSE LA BOCA.

Muy mítica también es la de la sobre generalización:

¡Anakin ha caído al lado oscuro!, ¡vamos a morir todos!
No me han invitado a la cena, nunca nadie me va a invitar a nada jamás…

Luego están las de leer el pensamiento que están muy relacionadas con las de personalizar, pensamos que todo es sobre nosotros:
Seguro que le caigo mal, está pensando de mí que soy un inútil, que soy feo, que soy un desastre. Pues no, siento deciros que no somos el ombligo del mundo, puede estar pensando en el penalti que le pitaron ayer al Madrid mientras nosotros nos estamos haciendo sangre para nada.

Una vez más:

STOP. Entrenen, compitan y CÁLLENSE LA BOCA.

¡Oh, dios! he quemado la tortilla francesa! soy un inútil, no se cocinar (verídico, doy fe). No vuelvo a hacer nada porque me va a salir mal siempre. Distorsión como un piano de grande.

Me estoy acordando de una muy buena que les pasa mucho a los neurotípicos y la sufrimos nosotros. Sí, esto de las distorsiones no es exclusivo de los autistas ni muchos menos, esto nos pasa a todos (de ahí que me centrara en el enfado porque es la que más de cerca nos toca).

Atentos que esta es muy buena: ¿Autista tu? imposible, tú no pareces autista, tú no eres eso. ¡Toma distorsión! ¿por qué es esto una distorsión? porque está viendo la realidad en función de sus propias creencias previas, sesgadas y faltas de información. Este es un caso claro de inferencia arbitraria donde su cabeza sólo ve lo que quiere ver, el portero no le deja ver la portería. Si encima insiste e intenta imponer su opinión distorsionada, te estará haciendo daño a ti y echando gasolina al fuego, lo que le generará ansiedad a él y a cualquiera.

Esta última os ha gustado ¿eh? ya lo sabía yo… ya sabéis lo que decir cuando os pase eso: STOP. Entrenen, compitan y CÁLLENSE LA BOCA.

 Según la web que consultéis habrá mil tipos de distorsiones diferentes, mil nombres distintos para el mismo tipo, etc. así que no voy a perder ni un segundo en hacer clasificaciones y demás. Lo importante aquí es que sepáis lo que son para poder identificarlas y, sobre todo, detenerlas.

Y ahora otra cosa que también os va a gustar mucho. Los neurotípicos también son rígidos. Muy rígidos, exactamente igual de rígidos que nosotros. ¿Qué cambia? el contexto. ¿Por qué? pues muy sencillo, olvidaos de un acto o evento social de un neurotípico… os cae la del pulpo.

Nosotros somos muy rígidos con los enfados porque tenemos un alto valor de la responsabilidad y del cumplimiento de las normas, pero ellos son exactamente igual de rígidos que nosotros en lo social. EXACTAMENTE IGUAL. Sin embargo, eso no lo ven…para ellos eso es lo normal, sólo ven lo nuestro.

Pues no, amigos neurotípicos, entrar en ebullición porque a nosotros nos importe un pimiento celebrar la nochebuena, porque no miremos a los ojos, porque demos palmadas cuando estamos estresados o porque utilicemos los cubiertos en la mesa a mano cambiada, eso amigos neurotípicos, es rigidez pura y dura porque para nosotros no tiene importancia de ningún tipo, al igual que para vosotros no tiene importancia alguna dejar el coche en doble fila.

Entrenen, compitan y CÁLLENSE LA BOCA.

The end.

Espero que os haya gustado.

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